Religiosidad a la mexicana: Primera parte

Siguiendo con mi actualización del blog, llego al turno a esa experiencia mística que supone una visita al santuario de Nuestra Señora de Guadalupe, el segundo mas visitado del mundo catolico despues de San Pedro. No se si conoceréis a esta advocación de la Virgen todos, pero en México es omnipresente, en las paradas de metro, taxi, en los mercados, por la calle, la imagen de la virgen de Guadalupe esta siempre presente; todo el mundo cree en ella, hasta los ateos; mezcla entre cristianismo y la madre tierra de los antiguos mexicas es, sin duda el personaje mas popular del país.

El santuario es un sitio pintoresco; cinco basílicas. Empezando por la Barroca (todo es Barroco en México) original, que tiene el suelo ondulado como el mar y cada pared en una dirección; de manera que entras dentro y te mareas, parece que vas borracho. No es fruto de un arquitecto alcohólico, sino de un suelo pantanoso y terremotos constantes (el lunes hubo uno de 5.7 a las 12 de la noche y ni me entere, y eso que estaba despierto toleteando en el messenger…). Luego están la del pozo (la mas mona) la de la montaña, la de los capuchinos y la moderna, un enorme edificio del siglo XX feo como el solo (no se nota que es del mismo arquitecto que el precioso Museo Antropológico); en el que una cinta rodante permite a los peregrinos acercarse a la imagen de la virgen sin pararse (sino las colas serian históricas). Todo esto en un barrio casi de chabolas, pero dentro de un parque tan bien cuidado que ni en Inglaterra.

Las escenas….muy curiosas, desde gente andando de rodillas por toda la explanada, escenas del dia de los muertos, un Papamovil usado y dato estadístico ni un solo blanco…parece que las gentes “fresa” del país no gustan de mezclarse con el vulgo.



Todo concluyo con la compra de "Hijo de los Hombres" por 1 € en el topmanta (es increíble, los vendedores llevan DVD y tele encima para que compruebes la calidad de la imagen y el sonido) y nuestra primera visita el metro de México...y mejor lo dejo aqui que menudo ladrillo de entrada me ha salido.